un quark, hasta ahora la partícula más pequeña
Nací analógico. Significa que no existía internet, ni los celulares, ni redes
sociales, había que esperar en muchos procesos, el mundo era verdaderamente
amplio y nadie entraba en crisis por la ausencia de WIFI
Por supuesto, WIFI no existía.
Y así como la tecnología dio y da vueltas de páginas al
mundo llevándonos a lugares insospechados en muchos sentidos, también como
sociedades y como sectores dentro de esas sociedades nos creamos nuevas
problemáticas.
Tengo un hijo de 30 meses y es un ser digital, un nativo
digital
Marc Prensky , MBA en Harvard y Master en Pedagogía en Yale,
escritor, conferenciante, diseñador de juegos de aprendizaje creó este término
para aquellos nacidos en los ochentas y hasta la actualidad en su libro
“Inmigrantes digitales” (2001) estableciendo diferencias y saltos entre
aquellos que nacieron, crecieron, educaron tecnología a los inmigrantes
tecnológicos. Éstos últimos, personas que tuvieron que lograr una adaptación y
la lograron o no.
Benjamin navega mi celular, entra aYoutube y elige el
dibujito que quiere ver. Lo saca si se harta y busca otro. Está bien, es una
búsqueda lineal, desliza el dedo hacia arriba y hacia abajo, detiene el
timeline si quiere ver una parte que le hizo gracia y así.
Algo similar pasa con el televisor y con la compu, bueno
chico, despacio!
Me pregunto si llegará con el tiempo a alguno de estos
síndromes que tienen que ver con la redes sociales y la sensación de estar
perdiéndose algo, como el FOMO, Fear Of
Missing Out. Claramente, no es una enfermedad, pero solamente una década atrás
nadie entraba en crisis por olvidarse un smartphone en casa.
Pregunten ahora…Revisen sus propias sensaciones y observen
como sus perspectivas cambiaron ligeramente. En algunos casos radicalmente.
Y les hablo de la “vibración fantasma”, esa percepción
anticipada de que va a sonar o vibrar el móvil en nuestra cercanía y no lo
vamos a tener a mano para recibir el último WAPP estúpido.
Intuyo que Benjamin y toda una generación que hoy construye
su virtualidad pasará a vivir en ella de
una manera que ni siquiera concibo ahora menos que quiera hacer ciencia
ficción.
No perteneceré a todo el universo que estará a su alcance,
desde el hardware manejable hasta el nano que
combata la posibilidad de degeneración de células y le corte la cabeza a
un cáncer si que llegue a enterarse.
La vida tiene un
humor que a veces no capto.
En una visita de rutina al cardiólogo me entero que mi
presión estaba por los cielos y podría haber volado ( muerto) con la
combinación correcta de stress, cotidianeidad, mala alimentación y la falsa
idea, Y LA FALSA IDEA, que resonaba enn mi cabeza y decía que iba a vivir para siempre.
Uno reacciona de diferentes maneras a noticias de esta
calaña. Elijan su forma de reacción. Tuve que pelearme y enojarme con mi
consciencia para captar apenas el humor
algo agrio de la vida traído a mi puerta.
No hubo síndromes, ni redes sociales, ni buena o mala
velocidad ni ansiedad por la siguiente noticia.
El presente me aplastó y mi única y bendita preocupación fue
no ver más a mi familia. Si, estoy hablando de morir.
Y como de
pequeños síndromes se trata ésta historia, uno nuevo creció en la palma de mi
mano, uno breve casi inocente que me llevaba a vivir el minuto en 60 segundos.
Old style, a la vieja manera. Aquí y ahora. Y mejor que ese minuto fuera tan
valioso y jugoso y de tan buen sabor que le quitara el sentido a esas pequeñas
gilipolladas virtuales que te hacen pensar que estas bajo el mandato del
arroba.
Valoren el
breve tiempo que alguien como yo tomó en
dedicarles éstas palabritas y alguna diminuta reflexión. Valoro enormemente el
tiempo que Uds. Gastarán en leerlo
Dicen que
muchas grandes cosas tienen comienzos diminutos.
Será cierto?
Tienes razón, yo hace tiempo que procuro desconectar e ir desconectado. Procuro olvidarme el smartphone en casa, lo dejo sin cargar, etc. Lo he hablado muchas veces con mi mujer, porque antes, estabas todo el día fuera y al llegar preguntabas "¿me ha llamado alguien" y ya está, no pasaba nada. Ahora todo es rápido, urgente y adictivo. Tenemos la falsa sensación que con todo esto tenemos más control sobre nuestra vida, pero en realidad estamos vendidos y nos alejamos de la realidad no importa los planes que tengamos cuando toca, toca. Así que toca disfrutar al máximo cada día de lo que nos haga felices, y estoy seguro que no es ni intenet, ni el móvil, ni el wifi ni nada de esto.
ResponderBorrarCuídate esa tensión.
Uy. Otro hipertenso. Bienvenido al club. Mi hija de pequeña, cuando cogía un album de fotos de los antiguos, intentaba pasar las fotos con el pulgar, como si estuviera en la galería de fotos del teléfono.
ResponderBorrarLa vida.